iPad: una historia bipolar

Apple vendió más de 15 millones de iPads en 2010; ha vendido cerca de cinco millones este año 2011 (ene-abr). Espera producir 100 millones de unidades para el 2013. Un producto con solo 1 año en el mercado, ha producido una conmoción inusitada.

Su salida al mercado ha significado una caída de las ventas de ordenadores convencionales (portátiles-incluyendo las agonizantes netbook- y computadoras “de mesa”) del orden del 3%, y un incremento del 272% en las ventas de las tabletas Apple.

Productos y productores  como Zaggmate, Wacom, Vogel System, AViiQ, Joystick-It, IK Multimedia, Pad and Quill, CoRedEye han surgido y sobreviven a la “sombra” del best seller: si el iPad no existiera, habría que ver qué sucedería…

Se hacen exposiciones de arte (ver David Hockney) usándolo como soporte. Escuelas o sistemas escolares completos deciden sustituir sus libros convencionales por este nuevo portador. Se utiliza como paradigma, las empresas más diversas lo imitan, compiten con él.

En fin, un buen producto, con una temprana y excelente colocación en el mercado gracias a inteligentes campañas publicitarias, un público fidelizado…No obstante, se excluyen las posibles manchas de este nuevo “sol” tecnológico: si no tiene conexión USB, las pilas no son intercambiables (o sea, que cuando agoten su capacidad de recarga, habrá que cambiar el aparato completo),no pueden utilizarse archivos Flash, o cuesta más que un ordenador convencional (de mayor potencia incluso)…¡pues nada, no problem!

Pero (primer pero)… hay otras “manchas”, no detrás del producto en sí mismo, sino de todo el montaje de su producción, algo que -sin dudas- matiza los resultados. Hábilmente Apple (en franca aplicación del outsourcing) fue a producir esta herramienta “ultra desarrollada” a lugares “infra desarrollados”, y esto…puede ser visto -en un primer enfoque- hasta como una ayuda: dar trabajo, mezclar con la producción de alta tecnología, crear una cultura productiva de altos estándares en poblaciones “poco desarrolladas”.

Pero (segundo pero)…la realidad está diciendo, desde hace más de 1 año, que el fin sigue sin justificar los medios, y lo sucedido en las plantas productoras de estas herramientas ha venido dando quehacer, aún en los más recalcitrantes medios informativos: 13 intentos de suicidio (9 de ellos “exitosos”), entre personas muy jóvenes (18-24 años). ¿Razón? “La presión insoportable y las condiciones laborales que sufren los empleados para cumplir con los objetivos de producción que les marcan las multinacionales” se leía en un artículo de hace un año atrás.

Pero (tercer y último pero)…ahora un informe de The Guardian (http://goo.gl/WUYZL) viene a echar leña al fuego: salarios de menos de 150 euros al mes, 48 horas semanales de jornada, solo un día libre cada 13. A los aspirantes a trabajar en estas cadenas productoras se les exige firmar una declaración comprometiéndose a no quitarse la vida. Se instalaron además redes antisuicidio bajo las ventanas de los dormitorios, donde reposan hasta 24 personas a la vez.

Ya Apple había tomado distancia de este peliagudo asunto, cuando el presidente ejecutivo de la empresa, Steve Jobs,  declaró  "preocupante" la ola de suicidios que se ha producido entre los trabajadores, pero ha asegurado que en la fábrica no hay "explotación". Sobre el uso de fuerza de trabajo infantil, o el despido (compañía taiwanesa Wintek) de trabajadores intoxicados por exposición a productos químicos sin la debida protección…poco se dice en su reporte de abril de 2011 (http://goo.gl/eV0K6), aunque aseguran haber redoblado la atención sobre el tema.

Según la consultora iSuppli (11-02-2010), fabricar el iPad con 16 gigas de memoria, a la venta por 499 dólares en EU, costaba 229 dólares en materiales más 10 dólares de mano de obra. El modelo más caro, con precio de 699 dólares (más 130 dólares si se quiere conexión 3G), memoria de 64 gigas, salía en unos 335 dólares (estos son datos de febrero de 2010, de la versión original del iPad, no del modelo 2).

iSuppli (16-03-2011) en un nuevo comentario, fija el costo total de la nueva tableta en $323.25 para el modelo CDMA de 32GB, mientras que la versión GSM/HSPA de 32GB es un poco más costosa con un total de $326.60 (ambos modelos tiene un precio de venta al público de $729). La mano de obra para cada unidad se mantiene en $10.

En resumen, una vez más, el “éxito” de una creación no debe ser medido desde un único  punto de vista, usualmente vinculado con los comportamientos de mercado, o desde la visión ajena de observadores que pueden no estar tomando en cuenta detalles del entorno global en que se produce la citada y triunfante “acción”.

Es como ignorar el costo de obras como las Pirámides de Egipto, o la muy famosa Muralla China (también conocida como el mayor cementerio del mundo, se considera que murieron cerca de 10 millones de personas durante su construcción), que puestas en perspectiva desde la dimensión de sus implicaciones humanas, pueden resultar igualmente impresionantes…y también llevarnos a cuestionar los epítetos con que -usualmente- se adornan por historiadores, turistas y comentaristas en general, cuando solo las caracterizan como “fruto del ingenio de sus realizadores”, “magna obra”, “joya de la arquitectura”,  “herencia ingenieril”… sin llegar a otros adjetivos más vinculados con la relación entre el costo real de su construcción (medidos en “escala” humana), y los resultados obtenidos .

Algunas preguntas nos rondan: en una situación hipotética, en la que viajáramos al pasado, pero sin olvidar los conocimientos actuales ¿aun conociendo el costo que iba a significar, si nos tocara elegir,  procederíamos a la construcción de La Muralla o Las Pirámides?¿debemos focalizarnos, evaluar los resultados, sin atender a los costos?¿el éxito es ajeno al “sufrimiento” previo?

Hmmm….las respuestas traen espinas!

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